2 nov 2015

¡! Doctor, he dejado de existir ¡!

Como conducta de acoso moral el “ninguneo” hace referencia a aquellos actos voluntarios, conscientes e intencionados que realiza una o varias personas sobre otra, con el fin único de  transmitirle su indiferencia, su rechazo, su falta de apoyo e interés así como  su total despreocupación.  Personalmente lo llamo “el maltrato silencioso”, es aquel que desde la más absoluta cobardía hiere a la persona que lo recibe cada día hasta que ésta enloquece, pierde los papeles, sufre una depresión, una crisis de angustia  o se va sin más (suicidio).
Se valoran en la actualidad como MALOS TRATOS aquellas actitudes violentas, explosivas, que amenazan, insultan y se posicionan contra alguien. Aquellas humillaciones públicas, golpes, daños físicos que, al ser observables podemos hacerles frente.  En cambio, el ninguneo no se ve venir, es sutil, malintencionado, denota maldad y falta de empatía en quien lo lleva a cabo, frecuentemente alía a terceras personas en su propósito que es sin duda lastimar y herir sin medida a una persona (la víctima).

Esta conducta de malos tratos ocurre en una oficina, en un hospital, en una familia y en el patio de recreo de un colegio. Afecta a todas las edades y condiciones  socioeconómicas. La realizan todo tipo de personas sin distinción de nivel académico o intelectual. Es sin duda un problema psicológico y social del que si bien, hemos sido todos/as víctimas en algún momento de nuestra vida, participantes en otros y verdugos/as conscientes o no,   manipulados o no. 
En el caso del acoso laboral y su recomendada denuncia, me gustaría decir que frecuentemente la persona acosada de esta manera se desorienta y confunde ya que comienza a hacerse preguntas sin respuesta; preguntas como qué ha pasado para que los que antes le daban los buenos días hayan dejado de hacerlo, los que antes compartían sus inquietudes laborales conmigo no me hablan, porque no me han avisado para las reuniones….etc.

¿Porque ya nadie me mira a los ojos?

“Doctor creo que no existo, no valgo para nada, no sé quién soy, siento miedo, angustia, me encuentro desesperanzado….”

Así comienzan las consultas en las que los malos tratos vividos en el trabajo, el colegio o la familia han calado e inundado a la persona.

                                 ZOOMPsicólog@s Narón. 

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